Crystal Negro y Blanco
100% Elegancia 100% Barcelona
Este apartamento urbano en Barcelona es una clara muestra de los elementos de una finca típica del modernismo, que aunque parte de una corriente general que surge en toda Europa, en Cataluña adquiere una personalidad propia y diferenciada. Llena de encanto con su cornisa decorada, altura imponente de techo y amplios ventanales, estos detalles brindan una sensación de grandeza a la estancia, siendo percibidos desde la entrada.
En esta vivienda quedan mezcladas la zona de Living y cocina, creando un solo ambiente. Esta forma de organizar el espacio ofrece la ventaja de mejorar la interacción social, incluso durante la preparación de las comidas, convirtiendo la cocina en la parte central del hogar.
En esta estancia, se apuesta por la utilización de colores oscuros. El negro es un color atrevido, pero que ayuda a crear ambientes más personales y con altos niveles de carácter, dando un aspecto elegante e impresionante gracias al acabado Negro de la colección Crystal.
Este negro luce un reflejo de brillo perfecto para los muebles bajos y columnas, que contrastado con el Blanco de los módulos altos, resultan en una combinación clásica y atemporal.
La distribución del espacio contempla muebles dispuestos en forma de U, perfecta para cocinar de forma eficaz, siendo ésta la máxima expresión del triángulo de trabajo. Es una teoría que consiste en conectar las principales zonas o puntos de trabajo para que el diseño de la cocina resulte ergonómico. Esta modulación ofrece una cómoda y amplia zona de trabajo, debido a que el perímetro central de la sala queda despejado, favoreciendo un buen ritmo y comodidad en las tareas y contempla una amplia península donde se ubica la zona de cocción.
Se ha contemplado un revestimiento de baldosas hexagonales como arrimadero, que se extiende por toda la longitud de la cocina y la enmarca, dándole un toque especial de la pared decorada al espacio.
Se trata de una cocina llena de personalidad, sin olvidar la importancia de ser una cocina práctica… donde cocinar se convertirá en un verdadero placer, donde se obtiene como resultado un juego equilibrado de contrastes, elementos modernistas mezclados con una cocina actual y funcional.
Una cocina con presencia.