Una cocina familiar es la que, además de estar adaptada para toda la familia, es acogedora y agradable. El ritmo de vida actual nos lleva a que tengamos poco tiempo para estar en familia y, en muchas ocasiones, el tiempo que compartimos con los nuestros es durante las comidas, por lo que la cocina ha adquirido un papel muy importante.
A continuación, repasamos algunos consejos útiles para conseguir una cocina familiar.
El espacio de la cocina
Antes de nada debemos tener claro que una cocina con pocos metros cuadrados también puede convertirse en una cocina familiar, aunque es cierto que como más grande sea la estancia más sitio tendremos para estar cómodos, sobre todo si en la familia hay niños.
Algunos clientes, comentan que al empezar a compartir su vida de pareja en una vivienda, la cocina era simplemente un sitio en el que se tomaban algo y charlaban mientras hacían la cena al terminar el día, pero que con la llegada de los niños esto cambia. Muchos deciden que es el momento de ampliar la cocina y una de las soluciones más rápidas y eficaces es crear una cocina compartida con el salón. De esta forma, se dispone de un lugar en el que los niños pueden seguir jugando y nunca los pierdes de vista.
Los muebles de la cocina
En una cocina familiar la distribución de los muebles es muy importante para su buen funcionamiento. Tener un fácil acceso al exterior nos ayudará a poder entrar la compra o sacar los cubos de basura con más facilidad.
Sabemos que los niños lo tocan todo, por lo que la seguridad es importante. Guardar los productos de limpieza en un sitio que no esté a su alcance, disponer de unos cubos de basura que se mantengan cerrados y no se puedan verter fácilmente o instalar cerramientos de seguridad en puertas y cajones es algo que tenemos que contemplar.
Una cocina agradable
Por último, hacer que sea un lugar en el que apetezca estar es algo indispensable en una cocina familiar. Como hemos comentado, es uno de los lugares más importantes de la casa y en el que pasamos más tiempo.
La iluminación será uno de los puntos clave para conseguir que nuestra cocina familiar sea acogedora. Un buen consejo es aprovechar la luz natural, aplicar técnicas para que la cocina se vea luminosa como utilizar superficies brillantes donde la luz rebote. También es muy importante que los puntos esenciales estén lo suficientemente iluminados, como es el plano de trabajo y la zona de comida, si la luz natural no es suficiente piensa en cómo se puede complementar con luz artificial, unos LED’s bajo los muebles altos será una buena solución.
El color de los muebles también influirá mucho en el tipo de sensación que tendremos al estar en la cocina, así que es bueno elegirlo a conciencia.